jueves, 20 de diciembre de 2012

Río Suzhou

Río Suzhou cuenta una de las historias de amor más intensas que conozco: La historia de amor entre Mardar y Moudan.

Mardar es un mensajero motociclista que se encuentra involucrado en actividades ilegales. Uno de sus trabajos es recoger a Moudan, por órdenes de su padre, y llevarla a casa de una tía. Esto ocurre durante varias veces. En los días en los que están juntos, Moudan no puede evitar enamorarse, él se convierte en su primer amor. Durante la película vemos como se desarrolla la relación entre ambos. 

Mientras Moudan intenta que él le corresponda, este último se concentra en no ceder ante ella, lo cual no le es nada fácil.

Durante la película, llegamos al punto en el que nos damos cuenta de que el trabajo de Mardar de llevar a Moudan a casa de su tía no es por simple coincidencia, ya que el grupo delictivo que frecuenta, planeó el secuestro de Moudan, secuestro del cual él intenta no participar, pero ya es demasiado tarde para poder evitarlo.

Moudan, que no tiene ni idea de esto, lucha contra la aparente indiferencia del hombre del cual está enamorada; lucha contra la duda y el constante rechazo, pero, al darse cuenta de que él es parte de su secuestro, se derrumba. Siente la traición en su máxima expresión, y lo único que se le ocurre es correr lejos de él.

Moudan corre y llega a un puente, debajo de este puente corre el río Suzhou, y de la desesperación y el dolor, Moudan se arroja a este río, no sin antes decirle a él que regresará en forma de sirena a buscarlo.

Mardar es enviado a prisión. Después de cumplir su tiempo, sale y lo primero en lo que piensa es en buscar a Moudan. Su cuerpo nunca fue encontrado, es por esto que este se aferra a la idea de que ella sigue con vida.

Esta historia es contada por un personaje que es videasta, y que se dedica a grabar las diferentes historias de la gente que lo contrata. 

La historia se empieza a desarrollar cuando este videasta, del cual no sabemos su nombre, es contratado por un bar para grabar a un show de sirenas que tienen como atracción principal. La sirena, de nombre Meimei, se enamora de este joven, empezando así su propia historia de amor, la cual cambia en el momento en el que aparece Mardar en escena, ya que Meimei es idéntica a Moudan.

Mardar está convencido de que Meimei es en realidad Moudan, a pesar de que esta le repite un sin fin de veces que no es así.

Esta confusión nos sigue a través de buena parte de la película, esa duda nos tortura, nos duele, al igual que le duele a Mardar.

Este review puede parecer un poco confuso pero les aseguro que la película vale la pena.
Porque, además de tener una buena historia, los actores interpretan muy bien su papel, tan bien que nos hacen sentir todo eso que sus personajes sienten.






Director: Lou Ye.
País: China-Alemania
Año: 2000.
Guión: Lou Ye.
Edición: Karl Riedl.
Con: Xun Zhou (Meimei/ Moudan), Hongshen Jia (Mardar), Zhongkai Hua (Lao B.)
Prod: Philippe Bober, An Nai.


"-Si te dejara ¿me buscarías? ¿como Mardar?
-Si
-¿Siempre? ¿Toda tu vida?
-Si
-Estás mintiendo. Cosas así sólo suceden en las historias de amor."

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